Alcañiz, 01 de Junio de 2020.

 

La Comarca del Bajo Aragón estrenará este próximo mes de junio un nuevo camión de recogida de residuos, destinado a la ruta de la fracción resto de los municipios situados en la zona del Mezquín. La adquisición de este nuevo vehículo ha supuesto una importante inversión cifrada en 165.770€.

 

Se trata de un camión de 14m3 de capacidad que sustituirá al más antiguo de los camiones del parque comarcal. Dicho camión va dotado de un sistema de pesaje para poder conocer el peso de todos y cada uno de los contenedores que recoge, haciendo posible un control y un conocimiento exhaustivo de los residuos que se producen en cada municipio.

 

Con la incorporación de este nuevo camión, el servicio de residuos cuenta con un camión con sistema de pesaje en todas las rutas, tanto en la recogida de fracción resto como en las fracciones de la recogida separada de los envases ligeros y el papel-cartón.

 

El estreno del nuevo camión coincide con una vuelta a la “normalidad” en el servicio de residuos, que recupera las habituales rutas de recogida establecidas a principios de año. Desde el pasado mes de marzo, las rutas y la dinámica de trabajo de los conductores del servicio se tuvieron que modificar para adaptarse al cumplimiento de las directrices de prevención de riesgos y de las diferentes normativas legales que surgieron a raíz de la pandemia por la Covid-19.

 

Durante todo este tiempo, los conductores del servicio de residuos han continuado estando “al pie del cañón”, desarrollando su trabajo en una etapa muy complicada, y han conseguido que el servicio, a pesar de la situación excepcional, funcionase de manera correcta y sin incidencias.

 

Los conductores del servicio de recogida de residuos, servicio básico en nuestra vida diaria aunque muchas veces nos pasa desapercibido, han demostrado que en tiempos difíciles, están ahí, día a día, recogiendo los residuos generados por todos los ciudadanos, por lo que desde la institución comarcal se quiere reconocer de manera pública su labor.

 

En su condición de trabajadores esenciales, merecen un fuerte aplauso colectivo.